Con menos emoción que en otras elecciones primarias, el pasado martes 12 de marzo Joe Biden y Donald Trump se han asegurado la mayoría absoluta de los delegados que deben elegir a los candidatos para las presidenciales del 5 de noviembre del Partido Demócrata y del Republicano.
Aunque será en las convenciones de sus correspondientes partidos cuando se formalice el nombramiento, ya no queda ninguna duda y se consideran virtualmente candidatos. En realidad, tanto Biden como Trump se habían asegurado en la práctica la nominación con los resultados de hace una semana, cuando ambos arrasaron en el denominado “supermartes”.
Anteriormente hubo otra noticia importante relacionada con las elecciones estadounidenses. La Corte Suprema de EE.UU. falló el 4 de marzo a favor de permitir que el expresidente Donald Trump aparezca en las boletas de las elecciones primarias republicanas a la Casa Blanca. La decisión resolvió una serie de disputas judiciales en tribunales estatales respecto a la elegibilidad de Trump por su implicación en los disturbios del 6 de enero de 2021 en Washington DC.
En su libro Esclavos Unidos, la periodista Helena Villar, corresponsal en Washington nos explica con detalle el funcionamiento de su sistema electoral y nos da algunos datos muy elocuentes, bastante silenciados en los medios. Por ejemplo que, si sumamos los habitantes ilegales y los privados de libertad que no tienen derecho a voto, el 10% de los estadounidenses no tiene derecho a votar. A ello se añaden otros 76 millones de habitantes que, en 2018, no pudieron votar por no haberse registrado antes, ya sea por dificultades a la hora de hacerlo o directamente por fallos a la hora de completar la solicitud.
Todo esto explica, nos recuerda Helena Villar, que la nación norteamericana ocupe uno de los últimos puestos en participación electoral de todas las democracias avanzadas.
En Esclavos Unidos descubrimos muchas cosas más de sus elecciones, como la desigualdad de voto o el blindaje bipartidista que limita el espectro político a solo dos opciones.
Ahora que Estados Unidos y sus elecciones están de actualidad es un buen momento para conocer “La otra cara del American Dream”.
